Vino Blanco

Un Chenin Blanc sudafricano aromático y equilibrado del Western Cape que seduce con sus notas de fruta de la pasión, manzana y toques de membrillo. Un vino fresco, con acidez vibrante y un retrogusto mineral. Ideal para mariscos, aves o quesos suaves.

Un Chardonnay sudafricano elegante, expresivo y de textura seductora del Valle de Stellenbosch, que cautiva con sus aromas de pomelo amarillo, lima y sutiles toques de almendra tostada. Un vino vibrante, con una acidez crujiente y un final delicioso. Ideal para pescados grasos,

Un Chenin Blanc sudafricano concentrado, vibrante y de gran textura del D.O. Swartland, que envuelve con sus aromas de cítricos, manzana, frutas de huerta y un sutil recuerdo a fósforo. Un vino potente, complejo y con una acidez óptima. Ideal para pescados blancos, carnes blancas, risottos o platos con notas frutales.

Un Chenin Blanc sudafricano mineral, vibrante y estructurado del D.O. Swartland que envuelve con sus aromas de membrillo fresco, melocotón blanco y un distintivo carácter de tiza. Un vino con una textura firme, una acidez viva y un final zesty y prolongado.

Un Riesling sudafricano vibrante y expresivo del Valle de Elgin, que seduce con sus aromas de manzana verde, flor de manzana y toques de miel de fynbos. Un vino fresco, con una acidez vivaz y un delicado equilibrio entre dulzor y nervio. Ideal para maridar con mariscos frescos,

Un ensamblaje blanco sudafricano emblemático y con gran finura del D.O. Coastal Region (principalmente Swartland) que seduce con sus exóticas notas de piña, pera y cítricos, junto a hierbas y especias. Un vino de gran pureza y densidad frutal, con una acidez cristalina y un final largo y seco. Ideal para mariscos, pescados blancos y preparaciones asiáticas.

Un Chardonnay sudafricano elegante y mineral del Valle de Elgin, que seduce con sus aromas de limón, pedernal y hierba seca. Un vino de cuerpo medio, con una textura sedosa y una acidez vibrante. Ideal para mariscos, pescados a la parrilla o aves con salsas cremosas

Un ensamblaje blanco sudafricano elegante, complejo y con gran carácter mineral del Valle de Elgin, que seduce con sus aromas de cítricos, té verde y un distintivo toque de pedernal. Un vino con gran acidez, volumen en boca y un final persistente. Ideal para mariscos, pescados blancos y preparaciones con hierbas.